Hoy vengo a enseñaros que se puede hacer con retales que guardamos con intención de usar. Pero a veces esa intención se queda en eso, la intención, y los retales se van acumulando...
Yo los retales, después de cortar algunos trozos aprovechables como indiqué en
esta entrada, los tengo guardados por colores en bolsas zip.
Hace unas semanas, una de mis hermanas me preguntó si podía hacerle unos agarradores (no sé el nombre técnico) para la cocina. Para agarrar las tarteras, fuentes del horno y demás.
Así que me puse manos a la obra, pero antes de nada también quería aprovechar otra cosa.
Tengo bastantes tiras de guata de los edredones. Una vez acolchados recorto las tiras laterales y normalmente las guardo, a no ser que sean muy estrechas.
Estuve buscando las más estrechas y me puse a unirlas.
Las corté rectas por un lado y las fui uniendo con zigzag. Luego sólo me quedó recortar más o menos el tamaño que necesitaba para las agarraderas.
Para la primera cogí la bolsa de telas lilas y decidí hacerla parecida a mis bloques de la colcha de
string quilt.
Fui cosiendo tiras hasta que cubriese el trozo de relleno. Luego busqué una tela para la trasera, acolché un poco más para que sujetase la tela trasera, le coloqué una cinta y con la misma tela de la trasera le hice el bies.
Con los retales amarillos hice un estilo Log cabin, pero descompensado. También aproveché la tela de la trasera para el bies.
Con las telas verdes lo hice un poco diferente. Fui cogiendo trocitos pequeños y los fui uniendo hasta hacer unos trozos más grandes.
Una vez colocada la tela de la trasera, estaba pensando que usar para el bies así que fui a la caja donde guardo los restos de bies y este amarillo me llegaba, así que listo.
Tres agarraderas para mi hermana y yo he aprovechado retales y relleno. Las dos salimos ganando.